La situación actual en la seguridad pública de San Pedro Cholula refleja una evidente falta de preparación y estrategias por parte de los nuevos mandos responsables, quienes han mostrado deficiencias en la mejora de este aspecto tan prioritario para la ciudadanía. La seguridad sigue siendo una de las principales demandas de los habitantes de Cholula, pero las anomalías dentro de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, encabezadas por el director de Tránsito Municipal, Capitán Daniel Saldaña Feria, han agravado la problemática.
Daniel Saldaña Feria asumió el cargo respaldado por Irvin de Jesús Jiménez Sánchez, quien fuera nombrado subsecretario de la Secretaría de Seguridad Ciudadana. Sin embargo, Jiménez Sánchez fue destituido tras revelarse aspectos cuestionables de su historial, dejando a Saldaña Feria en el puesto, donde ha generado múltiples controversias.
El 23 de noviembre de 2024, Saldaña Feria implementó un operativo denominado “Osiris”, que carecía de autorización y sustento legal. En este operativo, obligó a los agentes a detener vehículos y llevarlos a la Secretaría de Seguridad Ciudadana bajo el pretexto de que la situación estaba «arreglada». Posteriormente, se solicitó una cuota económica a los conductores para liberar sus vehículos, sin que este dinero fuera registrado oficialmente.
Adicionalmente, han surgido denuncias sobre el acoso hacia mujeres policías, a quienes presuntamente exige favores a cambio de beneficios laborales. También se señala que Saldaña Feria cobra cuotas a proveedores que ingresan a San Pedro Cholula, así como a elementos de la corporación, incluyendo 800 pesos por agente y 2,000 pesos para los motopatrulleros, bajo amenaza de cambios de área para quienes no cumplan con estas exigencias. Cabe destacar que el capitán no cuenta con los exámenes de control y confianza necesarios para ocupar su puesto.
Por otro lado, Sabas Lira Téllez, quien funge como comandante y supervisor sin la preparación adecuada, parece ser pieza clave en estas prácticas corruptas. Es señalado por gestionar cobros a rutas de transporte, proveedores y elementos, así como por realizar operativos llamados “Centauro”, supuestamente para decomisar motocicletas sin documentos, pero que en realidad sirven para extorsionar a los ciudadanos.
La situación también involucra a Andrea Góngora, colocada nuevamente en el área de peritos pese a las denuncias por maltrato y prepotencia, y a Armando Méndez Rodríguez, responsable del área de peritos y de accidentes, quien también estaría entregando cuotas al director. Asimismo, se acusa a elementos de consumir alcohol en el corralón y continuar trabajando bajo efectos del alcohol, con castigos mínimos de solo 24 horas, lo que evidencia la permisividad dentro de la corporación.
En resumen, lejos de mejorar, la situación de seguridad en San Pedro Cholula ha retrocedido significativamente, demostrando que las acciones actuales no garantizan una verdadera transparencia ni profesionalismo. La percepción generalizada es que «estábamos mejor cuando estábamos peor».