El próximo gobernador transformará Casa Puebla en un espacio para sectores desfavorecidos.
Alejandro Armenta, gobernador electo de Puebla, anunció que Casa Puebla, históricamente utilizada como residencia oficial, será destinada a servir a los sectores más vulnerables. Este inmueble se convertirá en un albergue para niños en situación de calle y personas necesitadas. “Casa Puebla será del pueblo. Aquellos con recursos pueden comprarse su propia casa”, destacó.
El espacio mantendrá algunas de sus áreas actuales, como la unidad de quimioterapia, el teatro al aire libre y un bosque cuidado que será dedicado a jóvenes y adolescentes, reafirmando su compromiso con la inclusión y el apoyo social.
Armenta subrayó que su gestión se regirá por los principios fundamentales de Morena: “Con el pueblo todo, sin el pueblo nada” y “Por el bien de todos, primero los pobres”. Además, enfatizó que los recursos públicos y las instalaciones oficiales serán utilizados para beneficiar a quienes más lo necesitan, con el objetivo de consolidar una administración cercana y solidaria.
El gobernador electo también aseguró que su gobierno será itinerante, priorizando el contacto directo con la ciudadanía. “Supervisaremos de manera personal el estado de escuelas, clínicas, carreteras y alumbrado público. Escucharemos a las y los ciudadanos en mercados y comunidades para atender sus necesidades de manera efectiva”, indicó.
Este modelo de gobernanza busca garantizar que las acciones del gobierno estén arraigadas en el territorio y respondan directamente a las demandas del pueblo, reafirmando su compromiso con un liderazgo sensible y accesible.