Por Josél Moctezuma
Las recientes amenazas contra dos alcaldes de Puebla se suman al ataque armado en Huixcolotla, donde fueron asesinados tres policías municipales. Ambos municipios forman parte del Triángulo Rojo, una de las zonas más violentas del estado, marcada por el huachicol y la disputa entre grupos criminales.
La violencia volvió a sacudir el corazón del corredor delictivo. Los presidentes municipales de San Salvador Huixcolotla y Eloxochitlán recibieron amenazas directas del crimen organizado, confirmó el secretario de Gobernación estatal, Samuel Aguilar Pala.
El funcionario precisó que ambos ediles solicitaron escoltas y protección especial, luego de recibir advertencias que elevaron la tensión en sus localidades.
Las amenazas surgieron apenas horas después de la emboscada en Huixcolotla, donde un comando armado asesinó a tres policías locales —entre ellos la comandante Yusami Monterrosas Apolinar, de 27 años—. En el lugar fue hallada una manta con mensajes intimidatorios, presuntamente firmada por un grupo criminal con presencia en la región.
> “Ambos presidentes municipales recibieron amenazas. La seguridad ya está a cargo de fuerzas estatales y federales para garantizar su integridad y la paz en la región”, señaló Aguilar Pala en conferencia de prensa.
Ante el repunte de violencia, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) asumieron el control de la seguridad en Huixcolotla, mientras se refuerzan los operativos en Eloxochitlán para prevenir nuevos ataques.
Huixcolotla —conocido como la puerta de entrada al Triángulo Rojo— es un punto estratégico en el traslado de combustible robado. Eloxochitlán, en la sierra sur del estado, enfrenta una situación similar: conflictos por el control del territorio y la creciente presencia de células armadas.
Las autoridades estatales anunciaron la implementación de patrullajes permanentes, labores de inteligencia y revisión de mandos policiacos municipales, ante sospechas de posibles vínculos con el crimen organizado.
Por instrucción del gobernador Alejandro Armenta, la Fiscalía General del Estado investigará el asesinato de los agentes municipales y reforzará las acciones para desmantelar las redes delictivas que operan en el Triángulo Rojo.
					
							
							
			
                                

